La Confederación Nacional de Instaladores y Mantenedores, C N I, ha reunido a 10 importantes empresarios instaladores de diferentes provincias españolas, que trabajan en áreas como la climatización, refrigeración, fontanería, electricidad, etc. Profesionales que viven el día a día de las instalaciones y hablan a diario con el cliente final, el usuario de las instalaciones. Estos empresarios han contestado a algunas preguntas que nos desvelan las claves de un sector en alza y en continuo cambio.
El usuario quiere un instalador de confianza
A la pregunta de cómo cree que el público valora a los profesionales de la instalación de su sector, coinciden todos los entrevistados en que el usuario está mejor informado y busca ante todo garantía y seguridad. El usuario se esfuerza en buscar un instalador de confianza y cuando lo encuentra acude a él cada vez que tiene un asunto relacionado con las instalaciones de su propiedad. “Cada vez es más frecuente que el cliente cuente con un instalador de confianza a quien le consulta todo antes de tomar una decisión”, afirma Cipriano Sánchez Acevedo, empresario de Ciudad Real.
Ha aumentado la profesionalidad con técnicas de trabajo más complejas, nuevos sistemas y maquinaria. No obstante, a menudo el sector no está bien valorado por las malas prácticas de la economía sumergida y el uso indiscriminado que hacen grandes operadores de sus bases de datos de clientes con fines puramente comerciales. Esto degrada el nivel de calidad de las instalaciones ya que “subcontratan instaladores a precios tan bajos, que la calidad del trabajo queda reducida a mínimos, empeorando la imagen del instalador”, como afirma Raúl de la Peña Aguilar, empresario de Sevilla.
Preocupa cada vez más la escasez de profesionales cualificados y la creciente carga administrativa
En cuanto a los principales problemas que encuentra en su actividad, la economía sumergida que representaba el mayor problema en el sector, cede el puesto a la escasez de profesionales cualificados. Los trabajos actualmente requieren de una formación técnica más cualificada y escasean profesionales preparados lo que causa preocupación entre los empresarios.
La competencia desleal de otros sectores ha aumentado hasta niveles incomprensibles, ofreciendo en sus ofertas el trabajo de instalación a precios y condiciones incomprensiblemente baratos, “nos encontramos con frecuencia presupuestos que se apartan de las más elementales normas de una buena instalación y por debajo de los estándares mínimos de calidad”, afirma Jorge Ibáñez Andreu, empresario de Alicante.
Deberíamos ir a una simplificación administrativa como fruto de la liberalización de la economía, pero cada vez se va legislando más y aumentando los requisitos normativos e impuestos al sector. Cada vez hay que dedicar más horas a la parte administrativa con una complejidad y una incertidumbre mayores, ya que la administración no ayuda a optimizar estas tareas.
Las nuevas tecnologías es uno de los retos más importantes al que tiene que hacer frente el sector. Móvil, tableta, aplicaciones, correo electrónico, programas informáticos, plataformas webs, tramitaciones online, certificado digital…. son conceptos que ya están integrados en nuestro día a día. Se lleva la oficina en el terminal móvil o tableta, cada día se utilizan más aplicaciones y los trámites online son un hecho. Es un reto al que el sector tiene que hacer frente pese a que haya muchas personas, sobre todo en algunos rangos de edad, que no quieran asumir.
Los intercambios de conocimiento con los fabricantes son decisivos
A la pregunta de si cree que la formación técnica que tienen los instaladores es suficiente para realizar correctamente su trabajo, todos los encuestados coinciden en que la formación es el camino hacia la excelencia, es la garantía de un futuro próspero, por lo que es prioritario que gran parte del esfuerzo se concentre en participar en cursos de experto en las áreas de trabajo específicas. A la formación profesional teórica existente que garantiza unos conocimientos de alto nivel, se une los intercambios de conocimiento con los fabricantes que marcan mucho los avances técnicos y su uso óptimo. Ocho de los diez encuestados coincidieron en la importancia de este intercambio de conocimientos e información.
“La escasez de incidencias en los trabajos de los instaladores, dan una idea del alto nivel que ha alcanzado la ejecución de los trabajos cada vez más profesionalizados. Por supuesto estamos hablando de auténticos profesionales, no de economía sumergida” manifiesta Lluís Segarra Castells, empresario de Barcelona.
Nueve de los diez encuestados, considera que el sistema de formación actual debería modificarse para llegar a una formación más activa, con presencia y trabajo práctico en el día a día de las instalaciones en todas sus fases, desde el diseño, pasando por la ejecución y el mantenimiento. “Los nuevos profesionales sin experiencia carecen de muchos conocimientos prácticos que sólo se adquieren trabajando”, afirma Luis Fernández Oro, empresario de Asturias. Por ello, entre las propuestas que hacen nuestros entrevistados, están la de Juan Vidal Tudurí, empresario de Menorca, que afirma que “los contratos de aprendizaje con cuotas iniciales a la SS nula o muy bajas para terminar de formar a los profesionales facilitarían la incorporación al mercado de trabajo sin grandes costes para la empresa instaladora”.
Recomendación a los jóvenes: apostar por el trabajo de calidad y la formación continua
Finalmente, a la pregunta de cómo ve el futuro los instaladores y qué le diría a un joven que quiera apostar por la profesión, todos los entrevistados consideran que la profesión tiene un gran futuro y que no faltará trabajo en los años venideros. “Cada vez hay más necesidad de buenos profesionales, bien sean mecánicos montadores, técnicos de diseño o directores de las instalaciones” afirma Jorge Ibáñez Andreu, empresario de Alicante.
“Los jóvenes deben tener claro que la empresa instaladora es algo más que el instalador. Se requiere una estructura empresarial para gestionar las cada vez mayores exigencias de la administración y de los clientes, y sobre todo, empezar a tener visión europea, todo lo que hacemos viene de Europa” finaliza Javier Cueto Martínez, empresario de Burgos y Presidente de C N I.