Ya ha llegado el invierno climático. La nieve, la lluvia y el frío se han convertido en algo habitual, y la calefacción, en un elemento más necesario que nunca.
Pero la factura energética es algo a tener también en cuenta en los próximos meses. Según datos del IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía), la calefacción supone el mayor consumo energético de una vivienda. En concreto, se estima que el 47% del gasto energético de los hogares en nuestro país se destina a calentar la vivienda en los meses invernales.
¿Cómo conseguir la mayor eficiencia energética de los equipos?
Los profesionales explican que debe hacerse una revisión de la caldera y de las instalaciones de calefacción. También deben tenerse en cuenta las inspecciones periódicas de los equipos, que son obligatorias cada cinco años.
En el caso de los radiadores, se debe llevar a cabo una purga periódica de los emisores, ya que cuando acumulan aire, su eficiencia es menor y el calor no se distribuye del mismo modo por todo el sistema.
También debe revisarse de un modo puntual la presión de la calefacción. Es importante realizar estas mediciones con la caldera fría y controlando la presión con un manómetro.
Trucos para ahorrar calefacción este invierno
- Ajustar correctamente la temperatura. Regular el termostato para mantener una temperatura de confort, que puede ser de 19-21º durante el día y 15-17º durante la noche. Fuera de estos intervalos, se considera que, por cada grado de más, el gasto energético crece de media un 7%.
- Apagar la calefacción por la noche y estando fuera de casa. Se tiende a pensar que es más económico dejar encendida la calefacción durante todo el día, aunque sea a baja temperatura. Sin embargo, lo adecuado es apagarla durante la noche y en los períodos diurnos en los que estemos fuera mucho tiempo. Pero si solo vamos a salir durante poco tiempo, lo mejor es dejarla encendida. Para optimizar la calefacción y encontrar la casa caldeada al regresar a casa, nuestro mejor aliado es un termostato programable.
- Asegurar un correcto aislamiento de nuestra vivienda. Ventanas y puertas a medio cerrar, tambores de las persianas mal aislados. Cualquier resquicio que permita que el calor se escape causará ineficiencias en el sistema de calefacción. Deben revisarse estos focos de frío, tapar con burletes las rendijas evidentes cerrar después de ventilar.
- Se deben utilizar cabezales termostáticos en los radiadores. Así se puede programar la temperatura específica que necesita cada una de las estancias y el tiempo de encendido. Esta instalación te ayudará a generar un buen ahorro en las facturas cada mes.
- No descuidar el mantenimiento de la caldera. Es conveniente llevar a cabo revisiones periódicas para comprobar si se encuentra en buen estado y detectar averías que estén pasando inadvertidas.