Fegeca, la Asociación de Fabricantes de Generadores y Emisores de Calor, ha presentado el nuevo proyecto de Etiquetado de los Equipos Instalados.

La etiqueta de los equipos instalados tiene por objeto reducir las emisiones de efecto invernadero y disminuir las emisiones que provocan la lluvia ácida (NOx) en el sector residencial promocionando la eficiencia energética, mientras se mantiene el nivel de confort de los consumidores.

En este sentido es esencial la sustitución del parque de aparatos de calefacción que es viejo e ineficiente.

Esta iniciativa que en España la ha puesto en marcha Fegeca, forma parte de una actuación a nivel europeo en la que ya son varios los Estados Miembros que lo han implementado, como son Alemania, Reino Unido y Austria o que están en vías de ponerlo en marcha como Italia y Francia.

Fegeca y todo el colectivo al que representa, consideran que es el momento oportuno para introducir esta nueva iniciativa de etiquetado para informar a los consumidores sobre la eficiencia o ineficiencia de sus sistemas de calefacción.

Esta campaña pretende sensibilizar sobre el estado de los equipos e informar sobre la existencia de tecnologías alternativas más eficientes como son las calderas de condensación.

Las calderas de condensación permiten ahorrar hasta un 25% del consumo de energía y reducir hasta un 35% las emisiones de CO2 respecto a una caldera convencional.

caldera-condensacion

Información de la etiqueta

La etiqueta de los equipos instalados indica de manera gráfica la eficiencia del equipo teniendo en cuenta la antigüedad y la tecnología de la caldera instalada, siendo la calificación A+ el indicativo del sistema de calefacción más eficiente y la letra G corresponde a equipos viejos e ineficientes, con más de 25 años de antigüedad.

Cuando el servicio técnico del fabricante acuda al domicilio del usuario, el proceso de etiquetado será muy sencillo y rápido. Sólo necesitará identificar:

  • Antigüedad de la caldera
  • Tecnología de la caldera

En base a estos dos parámetros, procederá a marcar en la etiqueta la calificación que corresponde y la pegará al equipo.

De esta manera, el consumidor sabrá exactamente el tipo de equipo que tienen instalado en su domicilio y la posibilidad de mejorar la eficiencia sustituyéndolo por uno de condensación.

Las calderas de condensación tienen una calificación A, y si estos equipos se instalan junto con un elemento de control de temperatura, la eficiencia del conjunto puede llegar a una calificación A+.

Los elementos de regulación tienen además un sistema de clasificación energética propio, según se muestra en la tabla, y en función de elegir uno u otro podremos alcanzar la Clase A+ del sistema.