Coincidiendo con el Día Mundial de la Refrigeración, celebrado el pasado 26 de junio, Agremia (Asociación de Empresas del Sector de las Instalaciones y la Energía) ha señalado la importancia que este sector, y especialmente el dedicado a la climatización doméstica, representa para la economía española.
En concreto, según las cifras aportadas por la Asociación de Fabricantes de Equipos de Climatización (Afec) para Agremia, el parque de equipos de aire acondicionado domésticos instalados en 2018 en nuestro país generó casi 500 millones de euros, un 10% menos de lo que se prevé para este año, que será uno de los más calurosos de la última década.
Para Emiliano Bernardo, presidente de Agremia, estos datos confirman la buena salud del sector. “Ahora bien, este mercado boyante da pie a que surjan empresas pirata o que se acentúe la picaresca en esta temporada”, señala.
En este sentido, recuerda que, aunque muchas veces los equipos de aire acondicionado se comercializan en tiendas de electrodomésticos o en grandes superficies, “no son un electrodoméstico más”. Cualquier aparato de aire acondicionado (salvo los portátiles o pingüinos) requiere de una instalación que está sujeta a una normativa muy específica (Reglamento de Instalaciones Térmicas RD 1027/2007), así como el cumplimiento del RD 115/2017 por el que se regula la comercialización y manipulación de gases fluorados y la certificación de los profesionales que los utilizan.
“Toda esta normativa implica que la empresa que instala el equipo de aire acondicionado debe cumplir una serie de requisitos que el consumidor tiene que conocer y exigir”, subraya Bernardo.
Así, mantienen desde Agremia, los equipos de aire acondicionado solo pueden ser instalados por una empresa que disponga de la habilitación en “instalaciones térmicas”. Esta habilitación la puede ostentar un autónomo o una empresa y la emite la Dirección General de Industria o equivalente de cada comunidad autónoma. “Esto es”, aclaran, “los fontaneros o electricistas no pueden instalar equipos de aire acondicionado de ningún tipo, salvo que posean esta acreditación en instalaciones térmicas”.
En caso de duda, Agremia aconseja consultar el Registro Integrado del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, donde se puede comprobar si la empresa que contrata dispone de la habilitación en instalaciones térmicas.