El Plan Integral de Energía y Clima 2021-2030 (PNIEC) publicado por el Gobierno prevé la renovación de las instalaciones térmicas (centralizadas e individuales) de más de 300.000 viviendas cada año. Un objetivo que está en consonancia con la Estrategia Europea de descarbonización de edificios, denominada Renovation Wave, que estima que uno de cada 4 inmuebles tendrá que eliminar el uso de combustibles fósiles antes de 2030, instalando equipos de climatización y de ACS renovables.
Para conseguirlo, el Plan de Recuperación, Transición y Resiliencia de España, surgido para la reactivación económica por la Covid-19 y dotado con fondos europeos, no financiará iniciativas y proyectos que impliquen consumo de combustibles fósiles, sino que apuesta por la renovación de equipos renovables con altas prestaciones.
Según la Asociación de Empresas del Sector de las Instalaciones y la Energía (Agremia), una de las tecnologías que está contribuyendo de manera directa a conseguir una reducción de emisiones y una mayor eficiencia energética es la aerotermia, más conocida como bomba de calor.
“Las empresas fabricantes están apostando por el desarrollo de equipos de aerotermia con altas prestaciones y confort, gracias a su capacidad renovable, y calidades, por su menor coste. Pero también las distintas Administraciones están fomentando e incentivado su uso en la renovación de instalaciones térmicas con combustibles fósiles”, explica Inmaculada Peiró, directora General de Agremia.
Así, desde Agremia se recuerda que el Ayuntamiento de Madrid ha puesto en marcha el Plan Cambia 360, en donde una de sus líneas de ayudas es la de calefacción y ACS sin emisiones. Esta tiene por objeto la reforma de instalaciones térmicas individuales, en las que se eliminen calderas que utilicen combustibles de origen fósil para su funcionamiento, por otros generados de calor sin combustión ni emisiones, como es la bomba de calor, que es capaz de seguir transmitiendo el calor (a través de radiadores y suelo radiante) para dar el servicio de calefacción y ACS.
“Quedan menos de dos meses –hasta el 26 de noviembre- para solicitar estas ayudas y la respuesta por parte de los ciudadanos para renovar sus calderas por otras más eficientes, está siendo de momento buena”, apuntan desde Agremia, que ha sido la entidad colaboradora seleccionada por el Consistorio para gestionar estas subvenciones.
Asimismo, la rehabilitación de edificios, que se impulsará en los próximos meses gracias a las ayudas procedentes de los fondos europeos, se apoyará en gran medida en la introducción de energías renovables, como es la aerotermia. A este respecto, Agremia, conjuntamente con CEIM e Iberdrola, han organizado el próximo 29 de septiembre la webinar “La aerotermia en la rehabilitación”, en la que expertos detallarán los últimos avances que se han producido en la tecnología, el diseño y la certificación de las instalaciones.