El episodio de calor inusual que en estas últimas semanas de mayo está asolando España, y que disparará los termómetros hasta llegar a temperaturas de hasta 40º C en los próximos días, está provocando un adelanto en el encendido de los aparatos de aire acondicionado en los hogares.

Antes de poner en funcionamiento los equipos de climatización, Agremia, la Asociación de Empresas del Sector de las Instalaciones y la Energía, recomienda adoptar una serie de medidas para garantizar una adecuada puesta a punto y evitar un incremento en la factura de la electricidad.

Para empezar, Agremia recuerda que los equipos de climatización, en particular los que no son portátiles, no son meros electrodomésticos, sino que se trata de equipos que forman parte de la instalación térmica de la vivienda, por lo que su instalación, uso y mantenimiento están sometidos al RITE (Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios), que es un reglamento de eficiencia energética. En consecuencia, dichas operaciones sólo deben ser realizadas por empresas instaladoras o mantenedoras habilitadas.

No obstante, los usuarios pueden verificar el estado de algunos de los elementos de los aparatos de aire acondicionado siguiendo estas sencillas pautas:

1) Comprobar que las conexiones eléctricas que alimentan el equipo están en buen estado.  Agremia aconseja revisar que el cableado no está en malas condiciones, o que los equipos no están conectados a regletas junto con otros aparatos del hogar. «Estas pueden no estar preparadas para soportar las intensidades de los elementos conectados o no contar con el debido aislamiento, de manera que puedan producirse sobrecalentamientos o incluso cortocircuitos que pongan en riesgo la seguridad de los residentes», explica Inmaculada Peiró, directora General de Agremia.

2) Revisar que los aislamientos de los circuitos frigoríficos (los tubos por los que circula el líquido refrigerante entre la unidad interior y la unidad exterior) están debidamente aislados. Según Peiró, «un aislamiento inadecuado o deteriorado por el paso de los años, provocará una pérdida energética que redundará en un mayor consumo eléctrico y una menor eficiencia del equipo».

3) Realizar una limpieza anual de los filtros de aire de los equipos de aire acondicionado o su sustitución periódica, que permitirá que el aire tenga una calidad óptima.  Los filtros suelen ser fácilmente accesibles, ya que tienen como objeto limpiar las impurezas y partículas en suspensión. El uso continuado de los aparatos y el paso del tiempo, hacen que dichos filtros se obstruyan perjudicando la eficiencia del equipo, reduciendo el caudal del aire y disminuyendo la eficacia del filtrado.

4) Seguir las pautas relativas al uso de los aparatos de aire acondicionado para lograr un adecuado confort y lograr la mayor eficiencia de los mismos, evitando que se dispare la factura de la electricidad por un consumo excesivo.

Con la entrada en vigor de las nuevas tarifas, el usuario tendrá que cambiar sus hábitos de consumo en lo que al uso del aire acondicionado se refiere, por lo que desde Agremia recomiendan tener en cuenta el horario en que se producirá el encendido de estos aparatos.

También el Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE) recuerda que la temperatura ambiente a la que se deben programar los equipos deberá ser de entre 24 y 25 grados en verano, cuando los aparatos se utilizan en modo refrigeración.

5) Tener en cuenta la normativa. El RITE establece que los aparatos de aire acondicionado o bomba de calor con potencia inferior a 12 kW, deben ser objeto de un mantenimiento preventivo cada 4 años si son de uso doméstico o cada 2 años para cualquier otro uso (comercios, oficinas, etc.), o bien con la periodicidad indicada por el fabricante en el manual de uso y mantenimiento del equipo. No obstante, desde Agremia recomiendan un mantenimiento anual.