La bomba de calor es una tecnología con múltiples ventajas. La eficiencia energética es una de sus características principales, por lo que su implantación en los Edificios de Consumo de Energía Casi Nulo es una garantía para el mejor funcionamiento de los mismos en términos de confort y ahorro.
El Código Técnico de la Edificación (CTE) es el documento legislativo que regula la calidad de los edificios y de sus instalaciones en España. Próximamente, verá la luz una nueva versión de su Documento Básico (DB) dedicado a la Eficiencia Energética, que va a fijar unos requisitos sensiblemente más exigentes que los actuales.
Con ello, se cumple la Directiva Europea dirigida a reducir el consumo energético de los edificios con vistas a disminuir las emisiones de CO2, fomentado el uso de energías limpias, de sistemas altamente eficientes y de energía procedente de fuentes renovables, y se establece que:
- después del 31 de diciembre de 2018, los edificios nuevos que estén ocupados y sean propiedad de autoridades públicas han de ser Edificios de Consumo de Energía Casi Nulo (EECN), y
- a más tardar el 31 de diciembre de 2020, todos los edificios nuevos han de ser Edificios de Consumo de Energía Casi Nulo (EECN).
Entre las tecnologías idóneas para estos edificios figura la Bomba de Calor, que proporciona calefacción, refrigeración y también agua caliente sanitaria, de un modo altamente eficiente y haciendo uso de energía procedente de fuentes renovables. Sin ninguna duda, la bomba de calor estará entre los sistemas más utilizados para lograr que los edificios alcancen la calificación de EECN.